Por Alexander Olivence.
Santo Domingo, RD – La tensión política se intensifica en el país, ya que varios partidos aliados del gobierno del presidente Luis Abinader han expresado su descontento ante la falta de nombramientos en posiciones clave dentro de la administración pública. En este contexto, el mayor general retirado y presidente del Partido Cívico Renovador (PCR), Jorge Radhamés Zorrilla Ozuna, ha alzado su voz en un llamado claro y contundente al mandatario.
Zorrilla Ozuna, quien ha sido una figura prominente en la política dominicana, destacó la creciente frustración de su organización y de otros aliados que se sienten marginados. «Estamos a la espera de ser nombrados en el gobierno. Nuestros dirigentes han trabajado arduamente y han mostrado un compromiso con el presidente y su gestión. Sin embargo, la falta de un decreto que formalice estos nombramientos nos deja en la incertidumbre», expresó el líder político en una reciente rueda de prensa.
La situación ha generado un clima de inquietud entre los miembros de los partidos aliados, quienes se sienten desestimados y olvidados en el proceso de toma de decisiones. «No se trata solo de posiciones, se trata de reconocimiento y de cumplir con los acuerdos que establecimos al unirnos a esta coalición. Esperamos que el presidente escuche nuestro reclamo y actúe en consecuencia», añadió Zorrilla Ozuna.
El PCR, que ha sido un aliado estratégico del gobierno en la lucha contra la corrupción y en la promoción de políticas públicas inclusivas, considera que la falta de nombramientos no solo afecta a su organización, sino que también puede impactar la cohesión del bloque gubernamental. A medida que se acercan las elecciones, la presión sobre el presidente Abinader para atender estas demandas se vuelve más evidente.
Por su parte, analistas políticos han señalado que la falta de acción en este sentido podría tener repercusiones en el apoyo electoral que el gobierno ha disfrutado hasta ahora. «Es fundamental que el presidente reconozca la lealtad de sus aliados y actúe para mantener la unidad en el frente político. Ignorar estas demandas podría resultar perjudicial en el futuro», advirtió un experto en relaciones políticas.
En conclusión, el reclamo del PCR y de otros partidos aliados es un signo del descontento que se está cocinando en el seno del gobierno. La administración Abinader enfrenta el reto de escuchar a sus aliados y actuar para garantizar la estabilidad política y la cohesión en un momento crucial para el país. La espera de nombramientos y el llamado a la acción son un recordatorio de que la política es un juego de alianzas, y que cada voz cuenta en la construcción de un futuro mejor para la República Dominicana.
