Santo Domingo.-Un no rotundo contra la fusión de los ministerios de Educación y Educación Superior expresó ayer la Asociación Dominicana de Profesores durante la parada cívica realizada frente al Ministerio de Trabajo, junto a organizaciones sindicales y sociales, que igualmente rechazaron la reforma laboral que pretende implementar el Gobierno.
Aprovechando el Día de la Constitución, fecha que calificaron de histórica, reclamaron que se respete la libertad sindical, y la Ley 112 (Estrategia Nacional de Desarrollo), que platea lo que debe hacerse en el sector educativo y el incremento de los recursos para ese renglón.
“Este es el comienzo de un proceso de movilización ascendente que concluirá cuando ellos (las autoridades) quieran que concluya”, proclamó Eduardo Hidalgo, presidente de la ADP en medio de la acalorada movilización.
“Nos oponemos a la fusión de ministerios, por considerar que ambas instituciones deben mantenerse con su autonomía y la especialización de cada uno de los sectores”, puntualizó Hidalgo.
Allí decenas de miembros de esa entidad lanzaron consignas y portaron pancartas alusivas a sus demandas. La Coordinación Nacional de las Organizaciones Sociales y Sindicales depositaron un documento dirigido a Luis Miguel de Camps García, ministro de Trabajo, en el que plantean su posición sobre las reformas “neoliberales” que entienden constituyen un retroceso para los trabajadores.
Entre los reclamos, exigen una reforma laboral que mantenga la cesantía, por considerar que es una conquista de los trabajadores y del movimiento sindical desde hace décadas, y no están dispuestos a perder.
Exigen libertad sindical; rechazan el aumento de las horas extras de 80 a 120 horas trimestrales, que definen como una sobre explotación, así como la pretensión de fraccionar la vacaciones a 6 días.
Citaron como ejemplo de rechazo a la libertad sindical el no cobro de la cuota a docentes y el impedimento al sindicato de obreros de Barrick. “Estamos pidiendo la atención a las escuelas, los jubilados, los coordinadores pedagógicos, las maestras de educación inicial y que ADP desarrolle sus actividades sin desmedro”.
